Preparándote para la incapacidad por maternidad: 9 pasos para el éxito

Si estás embarazada y actualmente trabajando, la incapacidad por maternidad seguramente ronda tu mente.

No hay duda de que estás entusiasmada por conocer a tu nuevo bebé, pero también es normal sentir ansiedad por ausentarte de tu trabajo.

Especialmente cuando estás acostumbrada a ser independiente — en lo económico y en otros aspectos.

El secreto para una transición fluida es saber qué necesitas hacer para prepararte.

Y eso incluye saber qué puedes compartir con tus compañeros de trabajo con anticipación para que puedas ausentarte con la mente puesta solo en tu bebé. 👩‍🍼

Hemos reunido algunos consejos para ayudarte a alistar tu incapacidad por maternidad con la confianza de que todo queda bajo control.

Es hora de elaborar tu lista de pendientes y empezar a tachar cada uno de ellos. ✅

En este artículo: 📝

¿Cuánto dura la incapacidad por maternidad en Estados Unidos?

Antes de profundizar en cómo prepararte para la incapacidad por maternidad y cuándo comenzar, es útil entender cómo suele verse la baja por maternidad en EE. UU.

De acuerdo con la Family and Medical Leave Act (FMLA), tienes derecho a hasta 12 semanas de ausencia sin goce de sueldo (con protección de tu puesto de trabajo) después del nacimiento (o adopción) de un hijo.

Para acceder a esto, debes:

• Llevar al menos un año en tu trabajo actual
  
• Haber trabajado al menos 1,250 horas durante los 12 meses previos a que inicie tu incapacidad
  
• Trabajar en una ubicación donde la empresa tenga 50 o más empleados en un radio de 75 millas (aprox. 120 km)

Si trabajas para una agencia pública o una agencia educativa local, el FMLA te cubre sin importar cuántos empleados tengan.

Pero vale la pena mencionar que si tanto tú como tu pareja trabajan para el mismo empleador, solo uno de ustedes está cubierto — o pueden compartir las 12 semanas.

¿Es pagada la incapacidad por maternidad en Estados Unidos?

En cuanto a la incapacidad por maternidad pagada, eso depende enteramente de tu empleador.

En EE. UU., los empleadores no están obligados a otorgar un permiso parental remunerado, pero algunos sí ofrecen un salario parcial o incluso más tiempo libre.

Sin embargo, alrededor del 44% de trabajadores no son elegibles para la ausencia respaldada por FMLA (sobre todo trabajadores de color), lo que deja claro que no todas las nuevas mamás pueden acercarse a su incapacidad por maternidad con la seguridad que desearían.

Hay algunos indicios de que vamos en la dirección correcta: más de la mitad de los empleadores ofrecían incapacidad por maternidad pagada para 2020.

Pero todavía queda camino por recorrer.

Entonces, ¿qué puedes hacer para prepararte para la incapacidad por maternidad si no tienes garantía de recibir ayuda económica?

Más adelante cubrimos algunas opciones a tu alcance.

¿Cuándo debo prepararme para la incapacidad por maternidad?

Entonces, ¿cuándo empiezas a alistar el trabajo para tu ausencia?

Bajo el FMLA, se requiere que le avises a tu empleador al menos 30 días antes de la fecha en que planeas iniciar tu incapacidad.

Pero depende de ti decidir si quieres empezar tu incapacidad por maternidad una semana o hasta un mes antes de tu fecha probable de parto.

Esto te dará algo de tiempo para desconectarte del trabajo y reajustarte antes de que tu bebé haga su aparición.

Por otro lado, podrías esperar hasta el último momento posible para que la mayor parte de tu incapacidad por maternidad sea para convivir con tu bebé y recuperarte.

Sinceramente, el momento en que comiences a prepararte depende completamente de tu calendario.

¿Cómo me preparo para la incapacidad por maternidad?

¿Habrá alguien que asuma tus funciones temporalmente? Si es así, ¿qué deberías preparar para esa persona? ¿Y de qué se encargará exactamente?

Todas estas preguntas, y más, seguramente están en tu cabeza.

Y eso antes de considerar cómo será tu transición a tu nuevo rol como mamá.

Es… mucho.

Pero elaborar un plan de preparación para tu incapacidad por maternidad puede ayudar a mantener tu estrés de embarazo al mínimo — y cuanto antes lo hagas, mejor.

Además, cuando tú sepas que dejaste todo bajo control en el trabajo, podrás disfrutar más de tu tiempo libre con tu bebé cuando nazca.

¡Vamos a empezar!

Estos son los nueve pasos esenciales que querrás incluir en tu lista de pendientes para tu incapacidad por maternidad:

1. Habla con tu jefe

Si aún no lo has hecho, informar a tu empleador que estás embarazada debería ser tu primera prioridad.

Después de dar la noticia, inicia una conversación sobre cuánto tiempo de incapacidad por maternidad te gustaría tomar y tus planes tentativos para preparar el trabajo durante tu ausencia.

Esta es una buena oportunidad para recibir sus comentarios sobre cuál(es) de tus compañeros debería asumir tus funciones mientras estés fuera.

O si van a contratar a alguien temporal para cubrir tu puesto mientras no estés.

Saber esta información será fundamental para elaborar tu plan de transición, así que si tu supervisor no lo menciona, ¡asegúrate de preguntar!

No hay mejor manera de aprender a abogar por ti misma que haciéndolo. 💪

2. Habla con el departamento de Recursos Humanos

Las reglas y políticas sobre incapacidad por maternidad varían mucho según distintos factores, como tu historial laboral, tu empleador y el estado en el que vivas.

Por eso, tu Departamento de Recursos Humanos es el mejor recurso para entender los beneficios, la tasa de pago y la duración a la que puedes tener derecho.

Ellos podrán brindarte respuestas personalizadas a cualquier pregunta que tengas sobre la remuneración de la incapacidad por maternidad e incluso cómo podrás agregar a tu bebé a tu póliza de seguro en cuanto nazca.

Lo más importante es que te ayudarán a saber qué documentación necesitas mientras te preparas para tu incapacidad por maternidad.

Más información sobre esto a continuación.

3. Asegúrate de completar cualquier documentación necesaria

Antes de que se acerque demasiado tu fecha de parto, asegúrate de completar todos los trámites que necesitarás entregar a Recursos Humanos.

Si necesitas alguna constancia médica, asegúrate de solicitarla también.

Confirma también qué información necesitarás para agregar a tu bebé a tu póliza de seguro médico.

Por lo general, tienes 30 días a partir de la fecha de nacimiento para hacerlo, pero es buena idea tenerlo organizado antes de enfrentar la recuperación posparto y la falta de sueño.

Parte de esta documentación podría requerir la firma de tu médico, así que asegúrate de contar con toda la información de contacto que puedas necesitar.

4. Crea un plan de transición para tu incapacidad por maternidad

Con los pasos oficiales completados, es momento de elaborar tu plan de transición.

Esta será una de las partes que más tiempo te consumirá al preparar tu incapacidad por maternidad, pero también es una de las más importantes.

Básicamente, tu plan de transición detallará qué compañeros se encargarán de cada aspecto de tu puesto.

Empieza por crear una lista detallada de todas tus responsabilidades (no seas modesta), así como de los proyectos en curso y su estado actual.

Luego, decide qué compañeros serían los más adecuados para asumir cada una de tus responsabilidades.

Dependiendo de tu puesto, puede que quieras trabajar con un supervisor o con los miembros de tu equipo para asignar las funciones.

Esto ayudará a que todos se sientan cómodos desempeñando las nuevas tareas que asumirán y evitará que se quede algo sin cubrir.

5. Involucra a tus compañeros de trabajo

Una vez que hayas asignado a distintos compañeros para cada una de tus labores, programa reuniones con ellos de manera individual.

Revisa cada una de las nuevas tareas que realizarán y comparte cualquier consejo, sugerencia o actualización de tus proyectos.

Asegúrate de que se sientan cómodos con las tareas y contesta cualquier pregunta que puedan tener.

Si trabajas con clientes externos, avísales lo antes posible cuál de tus colegas será tu reemplazo temporal.

Para darles mayor tranquilidad en la transición, puedes programar reuniones introductorias y permitirles ir trabajando juntos poco a poco — así ambas partes pueden generar una buena relación laboral.

6. Crea recursos y listas para ayudar a otros durante tu ausencia

Antes de ausentarte, haz todo lo posible por ayudar a tus compañeros que cubrirán tus funciones.

Si tienes materiales o recursos que expliquen algunos de los procedimientos que tendrán que llevar a cabo, reúnelos.

Si crees que una lista de tareas diarias o basada en proyectos sería útil, créala también.

Tus compañeros probablemente tendrán más trabajo mientras estés de incapacidad por maternidad, así que todo lo que puedas hacer para aligerar su carga será muy apreciado.

7. Prepárate para tus últimos días

A medida que se acerque tu incapacidad por maternidad, comienza a transferir tus tareas a tus compañeros.

De esta manera, pueden ir asumiendo tus responsabilidades poco a poco y no tener que hacerlo todo de golpe en cuanto inicies tu baja.

Conforme se acerque tu fecha de parto, mantén un documento actualizado con el estado de los proyectos, por si acaso das a luz ese mismo día.

Así, si tu incapacidad por maternidad inicia antes de lo que todos esperaban, tus compañeros podrán ver en qué punto se quedó todo y retomar sin problema.

Solo asegúrate de que sepan dónde pueden encontrar este documento en caso de que no estés disponible para compartírselos.

8. Crea un plan para tu regreso

Así como planificar tu incapacidad por maternidad es importante, también lo es tener un plan para tu regreso al trabajo.

Esto incluye decidir si volverás a tiempo completo o parcial, de manera presencial o remota.

También querrás saber si todos tus proyectos y tareas te serán devueltos en cuanto regreses o si se irán transfiriendo gradualmente.

9. Planifica el contacto con tus colegas

Antes de decir adiós, decide cuánto quieres mantenerte al tanto de lo que pasa en el trabajo.

Algunas mamás prefieren recibir actualizaciones regulares para no llevarse sorpresas al volver.

Otras prefieren estar completamente presentes para su bebé durante la incapacidad por maternidad.

Y aunque es absolutamente válido que te desconectes, tener algún contacto con la oficina podría brindarte a ti y a tus colegas cierta tranquilidad.

Decide qué opción es mejor para ti y comunícaselo a tus compañeros y jefe.

Solo evita estar demasiado disponible.

Pronto verás que la incapacidad por maternidad es todo menos unas vacaciones.

¿Cómo me preparo para la incapacidad por maternidad sin goce de sueldo?

Prepararte para conocer a tu mini-tú es emocionante, pero no está exento de estrés financiero — y eso incluso si tienes garantizado un pago por tu incapacidad por maternidad.

Si no calificas para FMLA, tu preparación puede ser muy distinta.

Entonces, más allá de depender únicamente de los ingresos de tu pareja o de la ayuda familiar, aquí tienes algunas formas de prepararte para la incapacidad por maternidad sin paga:

1. Negocia la incapacidad por maternidad pagada: No siempre es la opción más sencilla, pero hasta unos días extra de licencia por enfermedad pueden hacer la diferencia.
   
2. Ajusta tu presupuesto: Si vives en un hogar con dos ingresos, intenta ajustar tu presupuesto a uno solo lo antes posible. Reduce costos de entretenimiento, recorta gastos o cambia de marcas en el súper. Puede ser un cambio pequeño, pero ayudará a largo plazo.
   
3. Explora opciones laborales: Si un periodo prolongado sin sueldo no es factible, habla temprano con tu jefe sobre la posibilidad de trabajar medio tiempo o de forma remota. Quizá podrías hacer trabajos freelance o de consultoría.
   
4. Seguro por incapacidad a corto plazo: Algunas pólizas de seguro de incapacidad a corto plazo pueden cubrir parte de tus ingresos durante la incapacidad por maternidad (sí, dar a luz cuenta). Incluso podrías acceder a prestaciones por incapacidad a través de tu empleador. Si optas por contratar un seguro privado, hazlo con anticipación, ya que no puedes inscribirte si ya estás embarazada.
   
5. Investiga beneficios de tu empleador o de tu estado: Revisa si el estado en el que vives ofrece beneficios de incapacidad a corto plazo, licencias pagadas u otros programas de ayuda. Algunos estados como California, Nueva York, Colorado y Washington ahora ofrecen licencia médica o familiar pagada.
   
6. Busca apoyo comunitario: No hay nada de malo en recurrir a organizaciones locales, ONG o grupos de apoyo para madres y padres — para eso existen. No solo podrías recibir ayuda financiera o acceso a productos para bebés de bajo costo, sino también conectar con otras mamás que entienden por lo que estás pasando (además de Peanut, por supuesto).

Ya sea que te estés preparando para cuatro semanas de incapacidad o tres meses, hay mucho que querrás (o necesitarás) hacer antes de sentirte tranquila tomando ese tiempo lejos del trabajo.

Pero con la planificación adecuada, un poco de estrategia y comunicación con tus compañeros, una transición fluida es posible.

Y no olvides ser ingeniosa.

Cada situación es única y ninguna circunstancia es igual, pero sin importar lo que tengas que hacer para reducir tu estrés financiero, no estás sola.

La comunidad de Peanut está abierta — siempre. ❤️