Desde uvas enteras hasta jalea de uva y jugo de uva, muchos de nosotros disfrutamos hacer que las uvas formen parte de nuestra dieta. Pero, ¿qué pasa cuando estás esperando un bebé? ¿Pueden las mujeres embarazadas comer uvas?
Bueno, todos estamos bastante familiarizados con la recomendación médica de eliminar el jugo de uva fermentado durante el embarazo (sí, estamos hablando del vino).
Pero con las uvas en otras presentaciones, es algo más complicado. Hay algunos beneficios para la salud, y algunas cosas a tener en cuenta. Así que entremos y exploremos la relación entre las uvas y el embarazo.
¿Se puede comer uvas durante el embarazo?
Se recomienda comer muchas frutas y verduras durante el embarazo.
El Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos (ACOG, por sus siglas en inglés) recomienda que la mitad de tus porciones esten constituidas por frutas y verduras.
Este grupo de alimentos es una gran fuente de vitaminas y minerales esenciales para ayudar a tu cuerpo durante el embarazo.
Y también son una buena fuente de fibra que ayuda a mantener a raya el estreñimiento.
Pero, ¿dónde encajan las uvas en este rompecabezas? Comparadas con otras frutas, ¿son las uvas buenas para el embarazo?
¿Son las uvas buenas para una mujer embarazada?
Sí, comer uvas durante el embarazo (junto con una amplia variedad de otras frutas) te ayudará a obtener las vitaminas y minerales que necesitas para mantenerte saludable. En particular, las uvas son una fuente de:
- Vitamina C. Buena para el sistema inmunológico, la vitamina C ayuda a absorber el hierro y al desarrollo de los huesos y dientes del bebé.
- Vitamina K, que ayuda a la coagulación de la sangre.
- Potasio y otros minerales esenciales, incluidos el calcio, magnesio, hierro y fósforo.
- Fibra. Esto y el hecho de que las uvas tienen un alto contenido de agua significa que pueden ayudar a prevenir el estreñimiento.
- Betacaroteno. Este es un químico que el cuerpo transforma en vitamina A. Es bueno para la salud de los ojos y para proteger las membranas mucosas del cuerpo las cuales actúan como barreras contra las infecciones.
¿Existe algún riesgo por comer uvas durante el embarazo?
Es posible que haya escuchado hablar sobre algo llamado resveratrol en las uvas y su posible impacto en el embarazo.
El resveratrol es un compuesto que se encuentra en la piel de las uvas rojas.
Se cree que tomar suplementos que contienen el compuesto tiene varios beneficios potenciales para la salud, desde ayudar a perder peso hasta combatir el cáncer, aunque la investigación sigue en curso.
Sin embargo, en un estudio de 2014 en primates, los investigadores encontraron que los suplementos de resveratrol causaban anomalías fetales.
Esto los llevó a recomendar que las mujeres embarazadas eviten tomar estos suplementos.
Aún así, es poco probable que el solo hecho de comer uvas cause un problema.
Los investigadores notaron que los efectos negativos “estaban claramente asociados con un alto nivel de resveratrol en los suplementos”.
Una pastilla de suplemento tiene alrededor de 250 a 500 miligramos de resveratrol, mientras que una taza de uvas tiene menos de un miligramo.
Si aún tienes dudas, siempre puedes limitarte a las uvas verdes durante el embarazo. Pero es poco probable que una porción ocasional de uvas rojas sea dañina.
¿Cómo disfrutar de las uvas de forma segura durante el embarazo?
Estos son nuestros mejores consejos para disfrutar de las uvas de forma segura y saludable durante el embarazo:
1. Consume uvas frescas siempre que sea posible
Para obtener los máximos beneficios para tu salud, trata de comer uvas frescas enteras (o en mitades) como refrigerio o como parte de una ensalada Son geniales para ese empujón de energía de combustión lenta.
Las pasas (uvas secas) también están bien, pero es mejor ceñirse a porciones pequeñas, ya que tienen un mayor contenido de azúcar que las uvas frescas.
Y es posible que desees limitar la cantidad de mermelada de uva, jaleas de uva para untar y jugo de uva endulzado, ya que estos tienden a tener mucha azúcar agregada.
2. Lava las uvas antes de comerlas.
Lavar bien las uvas con agua corriente ayudará a eliminar cualquier bacteria dañina o parásitos que puedan causar malestar. También eliminará cualquier residuo de pesticida.
Desafortunadamente, las uvas son una de las frutas con mayor probabilidad de estar contaminadas con pesticidas; con frecuencia aparecen en la lista negra del Environmental Working Group. Tal vez prefieras las opciones orgánicas si están a tu alcance.
También es una buena idea cortar las áreas magulladas o dañadas de la fruta, ya que estos son lugares donde a las bacterias dañinas les gusta pasar el rato.
3. Toma únicamente jugo de uva pasteurizado
El jugo de fruta pasteurizado (hecho de uvas u otras frutas) ha sido tratado para matar cualquier bacteria dañina, por lo que es seguro para beber durante el embarazo. Revisa la etiqueta de la botella o el cartón del jugo, ya que debe haber una advertencia si no está pasteurizado. El jugo recién exprimido de un bar de jugos o un mercado campesino es, lamentablemente, algo que probablemente debas evitar mientras estás embarazada.
Bien, te dejaremos continuar con esa ensalada de frutas…