Los síntomas de la perimenopausia son lo que podrías experimentar comúnmente a medida que te acercas a la Gran M.
Pero espera un segundo, ¿qué es la perimenopausia?
El peri en perimenopausia significa “cercano”. La perimenopausia, entonces, es el tiempo cercano (o más específicamente, previo) a la menopausia.
Es único y diferente para cada mujer. Pueden ser síntomas debilitantes para algunas o frustrantes para otras (¡como el control de la temperatura!). Mientras que algunas personas no tienen ningún síntoma.
Cuanto más sepas lo que puedes esperar, menos confusa puede ser la experiencia. (Mira, incluso así va a ser confuso, pero hacemos lo que podemos).
Así que, aquí va.
En este articulo 📝
- ¿Cómo saber si eres premenopáusica?
¿Cómo saber si eres premenopáusica?
¿Cuál es la edad promedio para la perimenopausia?
Siendo el preludio de la menopausia, la perimenopausia generalmente ocurre entre cinco y ocho años antes de la menopausia, pero puede aparecer incluso antes.
La menopausia se diagnostica oficialmente 12 meses después de tu último período. En los Estados Unidos, la edad promedio para que esto suceda es de 51 años. La mayoría de las mujeres lo alcanzan entre los 45 y los 55 años, pero puede suceder antes. Si lo hace, se conoce como menopausia temprana y puede tener algunos riesgos para la salud asociados.
Si te preocupa algo de esto, consulta con tu médico. No hay razón para pasar por esto sola.
Los síntomas de la perimenopausia
Entonces, ¿cuáles son los signos de la perimenopausia? Lo extraño es que, si bien solo escuchamos sobre cinco o seis de ellos, esta lista es larga.
- Te has vuelto experta haciendo desastres. Decidimos comenzar con un síntoma ridículo. ¿Por qué no? Si te sientes un poco más torpe de lo normal, estás ante un síntoma real. ¿Envejecer aparatosamente? Definitivamente. Es mucho más divertido de lo que parece.
- Ni frío ni caliente. Fogajes. Escalofríos. Estos son los síntomas más comunes de la perimenopausia.
- Pierdes densidad ósea. Lo que significa que eres un poco más frágil de lo normal. Y puede ser propensa a la osteoporosis.
- Tus períodos parecen estar teniendo una pequeña crisis de identidad. No se definen en términos de frecuencia y duración. Los períodos de perimenopausia pueden ser muy caprichosos. Y:
- Estás efusiva. (Sangre, claro está). Sí, no es raro experimentar un fuerte flujo menstrual durante esta época. (Si estás preocupada, comunícate con tu médico).
- Puede ser más propensa a las infecciones por hongos y:
- La vagina puede sentirse seca e irritada. Y sí, esto puede hacer que el sexo sea doloroso y que sea lo último que quieras hacer. (No hace falta recordarte que solo debes hacerlo cuando quieras hacerlo).
- Te despiertas empapada. Sí, sudores nocturnos. Lo peor.
- Hueles diferente. A veces en el área de la ingle. A veces, en otras partes de tu cuerpo.
- Tu cuerpo está literalmente acalambrando tu estilo. Calambres musculares. En todas partes. Piernas. Espalda. Brazos. Cuello. En todas partes. Esto podría tener que ver con deficiencia de calcio o cambios hormonales.
- Todo el asunto da dolor de cabeza. Uno realmente malo. Y esto pasa a menudo. Los dolores de cabeza y las migrañas pueden ser agobiantes. Tu médico puede recetar triptanes para ayudarte en este departamento.
- Todo da igual. Esto puede ser un síntoma de haber soportado demasiadas tonterías durante demasiado tiempo. O es la perimenopausia. Si te sientes letárgica, esta podría ser la razón.
- Estás completamente exhausta. Tan condenadamente cansada. Pero de nuevo, esto podría ser todo tipo de cosas, como las demandas insaciables de la vida doméstica y laboral.
- Pero en realidad no puedes dormir. Tu cerebro comienza a correr en cuanto golpeas la almohada. ¿Por qué no se puede apagar por un segundo? Y luego:
- Te quedas dormida solo para despertarte a los cinco minutos. El concepto de un largo sueño parece no existir ya. Podría ser estrés. Podría ser la perimenopausia. Podría ser de todo un poco.
- Pareces no poder recordar tus sueños. Este síntoma es realmente extraño, especialmente si estás acostumbrada a recordar sueños con gran detalle. De alguna manera, dejas de tener acceso a esta facultad.
- Parece no poder recordar las cosas tan bien como antes. Si te preocupa tu memoria, es una buena idea consultar con tu médico para asegurarte de que todo esté bien.
- Tantos problemas con la orina. Quieres orinar todo el tiempo. Orinas cuando estornudas, saltas, te tiras un pedo, te ríes. Ushhh. Ya bastaaaaa.
- La “Rabiambre” no es un mito. Cuando necesitas comida, necesitas comida. Esos bajones de azúcar pegan más fuerte que nunca.
- Tienes antojos extraños. En momentos extraños. Cosas saladas. Cosas azucaradas. Cosas que ni siquiera has pensado comer en años. Y en los momentos más extraños. Sí, parece que la merienda de medianoche vuelve a estar de moda.
- Estás hinchada. Estás reteniendo agua como si estuvieras en una larga jornada por el desierto. Ok, cuerpo ¿es esto realmente necesario?
- Tu cuerpo se está expandiendo. Tienes pleno derecho de sentir lo que quieras sentir sobre esto, solo trata de descartar cualquier regla cuando se trata de cómo te ves. Hay muchas maneras de ser bella.
- El equilibrio es un desafío. Es posible que a veces te sientas aturdida y mareada. Y:
- Experimentas zumbidos en los oídos.
- Has hecho algo de redecoración alrededor de tus ojos. Círculos oscuros. Mmm. Míralos brillar.
- Tu cabello literalmente se está cayendo. Y no solo de tu cabeza. Pero no te preocupes. Parece estar apareciendo en otros lugares para compensarlo: senos, espalda, mentón.
- Tus espinillas adolescentes están regresando. ¿Quién no siente nostalgia por el acné?
- Pensabas que no podría empeorar hasta que… Si vives con alguna enfermedad crónica o condiciones preexistentes, la locura hormonal que está ocurriendo en este momento puede ponerlas en pleno apogeo. Sé muy, muy amable contigo misma.
- Comienzas a estar afligida. Si (por alguna razón totalmente personal) no tuviste hijos, es posible que sientas una sensación de duelo durante este tiempo. Lamentablemente, no se habla de esto lo suficiente. Es real y duele. Tienes permitido sentir lo que sientes. El asesoramiento profesional puede ayudar mucho.
- Tus senos se sienten como si alguien dejara escapar el aire. O:
- Tus senos se sienten hinchados. De cualquier manera:
- Pueden sentirse sensibles o adoloridos.
- Tu corazón está desquiciado. Sientes palpitaciones en un momento, y luego se acelera en otro. Esto puede ser bastante aterrador, especialmente si es una experiencia nueva para ti. Tu riesgo de enfermedad cardíaca es mayor a medida que envejeces, así que consulta con tu médico si estás preocupada. (No hay preguntas estúpidas cuando se trata de su salud).
- Tus extremidades se sienten frías u hormigueantes. Esto puede ser un síntoma de un montón de cosas, desde diabetes hasta deficiencias de vitaminas y minerales, así que es mejor consultar con un médico acerca de esto también.
- Estás estreñida y/o:
- Tienes diarrea. Ush, intestinos. ¿Podrías elegir de una buena vez?
- Está todo seco. Piel, pelo, todo.
- Se siente como si insectos estuviesen arrastrándose sobre tu piel. Sí, esta es bastante rara. ¿Demasiada ciencia ficción?
- Tus ojos están secos y con picazón.
- Te duelen los dientes.
A menudo metemos estos síntomas en la carpeta de los síntomas de la menopausia, cerramos la gaveta y tiramos la llave. Sin embargo, podrían ser el resultado de otra cosa. Un chequeo completo puede ayudar a determinar qué es qué.
Por otro lado, por favor, por favor, ¿podemos empezar a hablar más sobre esto?
Bueno. Te estamos apoyando. Mis mejores deseos. 💕